La joyería dental es la tendencia más novedosa entre celebridades e influencers. Cada vez son más los personajes públicos que muestran su dentadura brillante adornada por joyas preciosas. Tanta es su popularidad que aumenta diariamente el número de personas que buscan imitar estas sonrisas. Definitivamente, las joyas dentales se están convirtiendo en una fascinación entre los más jóvenes, queriendo ellos también, tener una sonrisa tan única y vibrante. No obstante, desde Ulident queremos concienciar a las personas sobre la importancia de asegurarse bien cómo se lleva a cabo este tratamiento, puesto que se pone en juego la higiene y salud bucal de la gente. Al ser una moda tan reciente, el conocimiento sobre este tratamiento aún está muy poco difundido, lo que provoca un serio peligro entre aquellos que consideran realizarlo sin la supervisión adecuada de profesionales capacitados. En este artículo abordaremos la importancia de colocar una joya dental en una clínica especializada y los peligros que conlleva el caso de no hacerse así.

¿Qué son las joyas dentales?

Hoy en día, el embellecimiento dental va más allá de una dentadura blanca y bien alineada. Con el descubrimiento de los “piercings dentales” mucha gente ha encontrado una nueva fascinación relativa a su apariencia física. En su esencia, las joyas dentales son pequeños brillantes de cristal o piedras preciosas que se colocan estratégicamente sobre los dientes. Se trata de un tratamiento que emplea una técnica basada en utilizar la resina fotopolimerizable que asegura una adherencia segura de la joya sin dañar el diente. Generalmente, estos ornamentos se sitúan en los dientes superiores, sobre todo, los incisivos. Podemos observar que, a pesar de tratarse de un tratamiento muy simple y sin demasiado mantenimiento, requiere de un equipo de especialistas formados para realizarlo de forma segura y controlada.

Primeramente, es fundamental asegurarse de adquirir las joyas desde una fuente fiable, como en este caso, nuestra tienda online, que ofrece una amplia gama de joyas únicas y personalizables. Debe existir una garantía sobre la durabilidad de estos piercings y su calidad en cuanto a material. No disponer de dicha garantía puede afectar negativamente a la salud bucal.

Riesgos y consecuencias

En segunda instancia, cabe destacar los riesgos que puede conllevar colocar estas joyas de otra forma que no sea en manos de un profesional cualificado. El tratamiento deberá realizarse en una clínica dental equipada para hacerlo. El uso de pegamento o adhesivos no dentales debe ser evitado a toda costa, ya que puede causar daños irreparables en el esmalte dental, debilitando los dientes y aumentando el riesgo de caries y enfermedades periodontales. Otro factor es la falta de esterilización adecuada, la cual, puede provocar infecciones bacterianas y virales, convirtiendo las joyas dentales en un foco de bacterias que pueden causar graves infecciones en las encías y los tejidos circundantes. También es la falta de experiencia un riesgo inmenso de desplazamiento o pérdida de la joya, lo que podría llegar a provocar asfixia o aspiración. Por último, es necesario decir que una colocación incorrecta puede resultar en complicaciones dentales graves, como fracturas de dientes, irritación de las encías e interferencia con la mordida normal.

Conclusiones

Estas son algunas de las diversas consecuencias que puede tener una colocación de joyas casera o incorrecta.

He aquí un breve repaso de las razones por las que no debes acudir a la aplicación de joyas dentales casera:

Falta de esterilización adecuada: Los procedimientos caseros carecen de los estándares de esterilización necesarios, aumentando el riesgo de infecciones bucales.
Daño al esmalte dental: La aplicación incorrecta de joyas dentales en casa puede resultar en daño al esmalte dental, provocando sensibilidad y otros problemas dentales.
Riesgo de atragantamiento: Las joyas dentales mal colocadas pueden desprenderse y representar un riesgo de atragantamiento, especialmente durante el sueño o al comer.
Desplazamiento o pérdida: Sin la experiencia y los materiales adecuados, las joyas dentales pueden desplazarse fácilmente o caerse, lo que puede causar molestias y requerir atención dental adicional.
Potencial daño a la salud oral: La manipulación incorrecta de las joyas dentales puede causar lesiones en las encías, irritaciones o incluso problemas más graves que requieran intervención profesional.

La forma de evitar cualquier complicación es apelar a la razón ante todo y acudir a un especialista. A pesar de lo superficial que pueda parecer este procedimiento, su impacto en la salud bucal y la integridad dental es significativo y requiere la atención y experiencia de un profesional capacitado para garantizar resultados seguros y duraderos.

En cualquier caso, nunca es recomendable tomar acciones significativas sobre nuestro cuerpo por motu propio, por lo que asegúrate de acudir a un profesional que te garantice un servicio transparente en todo momento.

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