
Hilo dental vs. irrigador bucal: ¿Cuál es mejor para tu salud dental?
20 de febrero de 2025Las muelas del juicio son un tema que genera muchas dudas. Para algunos, son un dolor de cabeza (o mejor dicho, de boca), mientras que otros ni siquiera notan su presencia. Entonces, si no te duelen, ¿realmente es necesario extraerlas? En este artículo resolvemos esta y otras preguntas clave.
¿Qué son las muelas del juicio y por qué pueden ser un problema?
Las muelas del juicio son los terceros molares que aparecen entre los 17 y 25 años. En la antigüedad, nuestros ancestros necesitaban estas muelas extra para masticar alimentos duros como carne cruda y vegetales fibrosos. Sin embargo, con la evolución de nuestra dieta y el cambio en la forma de nuestra mandíbula, hoy en día muchas veces no hay suficiente espacio para que salgan correctamente.
Cuando las muelas del juicio crecen sin problemas y están bien alineadas, pueden quedarse en su lugar sin necesidad de extracción. Pero en muchos casos, pueden generar complicaciones como:
- Impactación: Quedan atrapadas debajo de la encía o crecen en un ángulo incorrecto, lo que puede causar inflamación y dolor.
- Infecciones y caries: Debido a su posición al fondo de la boca, son difíciles de limpiar correctamente, aumentando el riesgo de infecciones y caries.
- Dolor y presión en los dientes vecinos: Pueden empujar otros dientes y causar apiñamiento o problemas en la mordida.
- Quistes y daños en el hueso: En casos raros, pueden formar quistes que afectan la mandíbula y las estructuras cercanas.
¿Cuándo es recomendable extraerlas aunque no duelan?
Aunque tus muelas del juicio no te molesten ahora, hay situaciones en las que los dentistas pueden recomendar su extracción:
- Falta de espacio en la mandíbula: Si el crecimiento de las muelas del juicio afecta la alineación de los otros dientes, podría ser necesario extraerlas para evitar apiñamiento dental.
- Posición incorrecta: Si están inclinadas hacia otros dientes o crecen de manera horizontal, podrían generar problemas de mordida o dañar los dientes vecinos.
- Dificultad para limpiarlas: Si su ubicación dificulta su higiene adecuada, es probable que desarrollen caries o infecciones en el futuro.
- Prevención de problemas futuros: Algunos dentistas recomiendan la extracción preventiva en jóvenes antes de que las muelas terminen de desarrollarse completamente, ya que en esa etapa la recuperación suele ser más rápida y con menos complicaciones.
¿Cuándo se pueden dejar?
Si tus muelas del juicio:
✅ Están bien alineadas y no afectan a otros dientes.
✅ Han salido completamente y no presentan signos de inflamación o infección.
✅ Se pueden limpiar sin problema con el cepillado y el uso de hilo dental.
✅ No presentan caries ni daño en las encías.
Entonces, probablemente no necesites extraerlas. De todos modos, es importante que un dentista las revise periódicamente con radiografías para asegurarse de que no causen problemas con el tiempo.
El proceso de extracción: ¿Es doloroso?
Uno de los mayores miedos al extraer las muelas del juicio es el dolor. Sin embargo, la extracción se realiza con anestesia local, por lo que durante el procedimiento no sentirás dolor. Dependiendo de la posición de la muela, el dentista puede extraerla en pocos minutos o requerir una cirugía más compleja si está incrustada en el hueso.
Consejos para el postoperatorio
Si te extraen las muelas del juicio, sigue estas recomendaciones para una buena recuperación:
- Aplica hielo en la zona para reducir la inflamación.
- Come alimentos blandos y evita los muy calientes en los primeros días.
- No uses popotes ni hagas esfuerzo excesivo con la boca para evitar el desprendimiento del coágulo de sangre.
- Mantén una buena higiene bucal sin cepillar directamente la zona operada.
- Sigue las indicaciones del dentista y asiste a la revisión de control.
Conclusión
No todas las muelas del juicio necesitan ser extraídas, pero si no hay suficiente espacio o existe el riesgo de complicaciones, es mejor actuar a tiempo. La clave es consultar con tu dentista para evaluar su estado y tomar la mejor decisión para tu salud bucal. Si bien la extracción puede parecer intimidante, con los cuidados adecuados, la recuperación será rápida y sin complicaciones. Recuerda que cada caso es diferente, así que una visita al dentista es la mejor forma de saber qué es lo mejor para ti.